Existen varios tipos de sistemas para la crianza de vacas lactantes, tales como: el sistema de producción de leche en pasto, el sistema confinado como Free Stall, el sistema conocido como Compost Barn, y en todos ellos lo primordial es garantizar el bienestar de los animales y comodidad para que puedan vivir y producir sus productos de la mejor manera posible.
Pero, ¿qué es el bienestar animal?
El bienestar animal es el estado en que los animales disfrutan de condiciones de vida adecuadas a sus necesidades y gozan de buena salud. Es objeto de atención y estudio especialmente en el campo de la ganadería y en general de todos los animales que están bajo los cuidados del hombre.
¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de evaluar el confort y el bienestar de los animales?
El primer paso para la correcta evaluación es conocer bien el comportamiento de los animales y la persona indicada para ello es el manejador o el peón que trata diariamente y directamente con los animales. Desde el momento en que conocemos el rebaño, pasamos a la segunda etapa de la evaluación considerando la interacción de los animales con el medio.
Esta interacción abarca aspectos del entorno físico y social, las condiciones climáticas y la interacción con los seres humanos y las prácticas de gestión. La organización social, el tamaño del grupo y el espacio individual son algunas de las variables relacionadas con el entorno social que pueden afectar el confort animal, mientras que la cantidad y naturaleza del contacto con los humanos, expresada por el temor que la situación puede generar, son factores importantes que actúan sobre bienestar animal. Las instalaciones, incluido el tamaño de los comederos, bebederos, establos, tipos de piso, etc., componen el entorno físico y tienen una gran influencia en la comodidad de los animales.
El clima puede tener un impacto significativo en el confort y bienestar de los animales, representando el frío un problema para el recién nacido en el período de parto, y el calor teniendo consecuencias adversas en el desempeño productivo y reproductivo de los animales adultos. Las prácticas de manejo que interfieren con la comodidad de los animales incluyen aquellas que se
relacionan con la intervención más simple, como la alimentación artificial, que, además de la separación de la madre, implica un contacto muy cercano con los humanos, hasta cirugías, como el corte de cola y la castración.